Deja de ser santo, olvida la prudencia,
será cien veces mejor para todos.
Deja de ser altruista, olvida la rectitud,
el pueblo recordará qué es el sentimiento familiar.
Deja de planificar, olvidar sacar beneficios,
no habrá ningún ladrón ni ningún ratero.
Pero ni siquiera hace falta seguir
estas tres reglas; lo que sirve de verdad
es conocer la seda cruda,
tener la madera sin tallar.
Necesita poco,
desea menos.
Olvida las reglas.
No te turbes.
-de Lao Tse para Dani C.-
2 comentarios:
guau, javier.
qué te dije...
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