martes, 8 de marzo de 2011

Soldier Blue: Vaqueros 6 - Indios 3


Los claros noquean a los oscuros en un duelo aguerrido.


Esto no es una crónica (o sí)




Darle al play !


Recuerdo una noche en que seduje a tres mujeres en diez minutos en La Bruja.
Recuerdo ver Soldado azul * en un cine de verano, y Mi hermosa lavandería, Cielo líquido, Blade Runner y Karate Kid con mi padre.
recuerdo ver pelis de Buñuel, Godard y Chabrol en la 2 de madrugada en casa, y La matanza de Texas y Alien, el octavo pasajero, en el cine, y subir al Nyaragongo * * * con mi madre.
Recuerdo mi primer gol, jugando una reina, (por rondas, el que marca se clasifica y en cada ronda se elimina el último, también a veces por parejas, no convenía marcar el primero porque te tocaba el timbre de clase antes de pasar a la siguiente ronda, y dejarlo para el final era arriesgado)todo el mundo corriendo detrás del balón en un círculo, siguiendo su estela, formando un amplio semicírculo unos detrás de otros, yo el último, y pararme y pensar qué ridículo estamos haciendo todos juntos, y entonces el que iba primero tira, me da en el talón, y entra.
Recuerdo descubrir la biblioteca de ciencia ficción de -y que- mi padre me regaló Fábulas de Robots de Stanislaw Lem.
Y hojear La sintaxis de la imagen * de A. Dondis, de Agustín, y descubrir con 9 años que el mundo se dividía en dicotomías fantásticas.
Recuerdo discutir con Alejandro que forma y contenido no son antítetos, sino que se potencian mutuamente conformando un movimiento.
Recuerdo a Juan y a las tres brujillas, Diana, Belén y Marta, bailando un swing en un vídeo que me hicieron para mi cumpleaños cuando estaba en los asquerosos estados unidos de la oligofrenia, y que Dani me escribió que el atlántico era una pecera llena de peces de colores.
Recuerdo discutir con mi padre en la vespino yendo a San Diego con 4 o cinco años, disgustado porque me acababa de enterar de que Sevilla no tenía playa, y ver un charco y decirle, mira !
Recuerdo el segundo gol, en un saque de esquina, pensar, me voy a quitar de enmedio, no sea que meta gol en propia meta, dar un paso a la derecha, recibir un balonazo de cojones en el pecho y marcar gol en propia meta.
Recuerdo la canción más hermosa, cantada por mujeres africanas con vestidos y turbantes de colores en el duelo por la muerte absurda y evitable con Artenam del hijo del médico del hospital de Mongbwalu, y a un joven aprendiz trajeado e idiotizado gritando sandeces con el típico ritmo hipnótico de la curia entre canción y canción, en un lenguaje africano transparente, y el grito indignado de una mujer, en medio de la noche mandándolo a la mierda.
Y el enfado de mi madre al día siguiente por grabar con mi cámara parte del entierro.
Recuerdo a Maribel * cantando la canción que le dedicó a mi padre, Madurito interesante, en el Aeródromo Aviación, y lo difícil que era robarle un balón a Raulito.
Recuerdo a Philip y a Beguin borrachos de pura energía vital componiendole una oda a una petita de oro frente a mi jvc.
Recuerdo jugar Javi y yo solos en el patio contra toda una clase de 3º y hacernos pases perfectos a 40 metros.
Recuerdo la lucha a puñetazos con dos chavales marroquíes en la puerta de mi casa en la calle Viriato hasta que se rompió el cordón de mi Yashica FX2000. Y que les grité que las fotos por lo menos y uno de ellos sin parar de correr sacó el carrete y me lo tiró. Aunque se velaron...
Recuerdo en unas clases extraescolares de futbol, aburrido de ir perdiendo y de que no me pasaran ni un balón, cuando Antonio Luque me dijo que jugara de delantero, y yo, como siempre, entendí lo que quise, que era jugar en el otro equipo, y com me llegó un balón perdido a media altura y arramplé con él hasta la escuadra exacta de mi propia portería, dejándolos a todos bastante impresionados.
Recuerdo a mi madre salvándole la vida a un niño con una septicemia grave por una herida sin curar en un pie sin amputárselo.
Recuerdo la mañana en que B salía puntualmente, como cada mañana de puntillas de la habitación en el bungalou de mi madre, y yo que esa vez no me hacía el dormido, asustándome y despertándome de repente, y él hacer como si acabara de entrar.
Recuerdo marcar un par de goles en un partido entre San Antonio de los baños y la "selección" de la EICTV, y otro en un parque de Londres con el hermano de Mike y sus amigos, de cabeza, con 11 años.
Recuerdo bucear a ciegas en el denso y oscuro río Ituri, con un tubo entre las piernas sacando oro del fango, mirar hacia arriba y saber que el oro de verdad estaba ahí fuera, tras el dorado resplandor del sol cercando las tinieblas.
Recuerdo correr entre los juncos detrás de la payotte con Liz besándonos y caernos en un desague hasta el cuello.
Recuerdo a Ana Tello vestida de tuareg con su trabuco en una azotea de Asilah.
Recuerdo la final del torneo de futbito que ganamos contra los tunos.
Recuerdo besar a Anamari sosteniendo una pancarta contra la LOU.
Recuerdo a Ana Agnello, Zaida y Hélène salvándome de la furia suicida de tres tipos violentos y enormes recién salidos de un fotograma cualquiera de La Haine al salir de un restaurante japonés en París, y recorrer todo el barrio con Zaida al volante buscándolos para atropellarlos.
Recuerdo a Ida balanceándose en un pie y agarrándose a una palmerita, diciéndome que su hermana tenía 16 años y ella solo 6, pero que tampoco había tanta diferencia.
Y como en un recreo del Aljarafe Alfonso y yo, aburridos de jugar imposiblemente en un campo en el que se disputaban tres partidos a la vez, decidimos coger el balón y divertirnos con él, y todos los demás de nuestra clase corriendo detrás de los dos, y que no lo perdimos ni una sola vez hasta que sonó el timbre.
Recuerdo despertarme preguntando por la caja roja.
Recuerdo haberme convertido de repente en un regalo de cumpleaños.
Como le dije una vez a Alex Catalán aproximadamente, el mundo es una gran basurero cuajadito de diamantes.
Voy a tener una criatura con Cristina. Y me encanta.

Ahora sí, la crónica,

Los claros ganan

6 a 3 es un resultado merecido y meritorio para unos y otros. La puntería de Martínez y el refuerzo de Juan en la portería marcaron la diferencia a favor de los blancos en un encuentro en principio abierto, pues pese a lo desequilibrado de las alineaciones hay calidad y creatividad a raudales en ambos equipos.

Javi Berger abrió el marcador de cabeza (no se hizo daño, en cambio al marcador subió un uno con pajaritos dándole vueltas a la cabeza). Cuentan que el gol fue espectacular, saque de esquina de Dani y complicidad de Javi brillantes, incluso sin abusar de su estatura, pero yo no lo vi, pues me interesaba en ese momento por las lesiones de Albertín en la banda.
Por un instante los negros parecieron recuperar espacio con internadas peligrosas de Nano en las que servidor no ayudó mucho, pero fue Fran con un espectacular chupinazo que rebotó en el codo de Martínez el que igualó el marcador.
Los claros estuvieron sólidos en defensa parando Sergio Toledo, Pedro Jopo y Dani una y otra vez las incursiones bárbaras de Jorge, Bassim y Nano, y los oscuros mostraron sus debilidades en dos contrataques y punterazos imparables y casi seguidos de "Olfato" Martínez que pusieron el marcador 3 a 1.
Los oscuros nos pusimos las pilas animados por Jorge "a por ellos" y desbordaron en dos ocasiones triangulando a placer una Nano, Jorge y Sergio, y en un dribling destos míos de uy ! mira, un portero por los suelos, anda, lhapasaoelbalonporelsobaco !, ostias como he lligao yo aquí questoy solo con el balón a un metro la portería cuidao que viene Jopo, ah, sí, entró !
Por cierto que fue prácticamente el único semi-fallo de Juan bajo los palos en todo el partido.
Total, que tres tres, los negros a la remontada, parecía que la cosa podía funcionar, pero entonces, la defensa oscura, (Ricardo "Corazón de León" "Canallas donde estáis que siempre me dejáis solo" y alguno que pasaba por allí de vez en cuando), Félix, al que también dejamos más vendío que al chino del chiste de los mil chinos jugando al futbol en una cabina de teléfono una o dos de veces, y un Daniel Q*bert visiblemente recuperado desde la última jornada, defendiendo y corriendo la banda como un jabato, siempre desmarcado en las esquinas, obligando a Félix a no salir ante "Tanque" Martínez "la escuadra me ama", y dando dos señoras asistencias nos dejaron 5 a 3, tras lo cual resurgió en el último minuto un "punterita" Rodríguez que a pesar de las lesiones y su bajo rendimiento en los últimos partidos sigue significando gol, ajustadito al palo a media altura.

Bueno, y esto es lo que yo recuerdo, no sé si en realidad pasó algo así o fue todo lo contrario, en cualquier caso el próximo partido promete.















La servilleta:

CLAROS - 6

Martínez**** 4 goles
Javi Berger*** 1 gol
Alberto*** 1 gol
Daniel Cuberta****
Jopo**
Sergio Toledo***
Pedro***
Juan R**** 2 puntos Monchi

OCUROS - 3

Felix ** 1 punto Monchi
Ricardo **
Bassim **
Nano ***
Fran ** 1 gol
Jorge Casanova ***
Sergio Daroca ** 2 goles


El tercer tiempo tampoco estuvo mal, como siempre hubo de todo:

Radio en cubierta
Frank Black
Evil Dead
Army of darkness
Jasón y los argonautas
El ladrón de Bagdad
Historias de filadelfia
Jeremiah Johnson
Sidney Pollack
John Millius
Blue -soldier
Derzu Utzalla
Anvil

Deleznable
Plausibles
Rabbit

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bonito compañero, de todas sólo estuve en la final que ganamos a los tunos y sí estuvo bien de verdad

Martinez dijo...

Se te ha olvidado recordar tu primer gol olimpico y la atónita perplejidad en la cara de los zemos. Me ha gustado esta crónica, fiel relato.

Javi de Jong dijo...

Bravísimo... Literatura, cine, cervezas y fútbol. ¡Esos son los Lunes Partido!
Pedro has perdido la apuesta por deleznable.Je, je, je

Cancerbero dijo...

Por momentos creía que era Ruter Hauer quien hablaba... Enhorabuena!

Rosa, aspirante a tía- abuela dijo...

Me encanta que os lo paséis tan bien jugando al futbito y otras cosas. Conozco a algunos de vosotros desde que erais pequeñoas, pero esto va por Sergio Daroca:
¿Podré tirar un poco de tía-abuela?
Un besazo muy grande para tí y Cristina y a disfrutarlo ya, desde ahora, que crecéis muy rápido. Rosa

Zinedine Zidane dijo...

naves estallando más allá de Orion, rayos C en la puerta de Tanhauser, por cierto que según mi madre Blade Runner la vi con ella.
Gentes, la verdad que sí que hemos compartido momentos intensos y fantásticos,con y sin balón.
Rosa, a ver si nos vemos ! Un besazo enorme !